El labio leporino es una escisión o separación que ocurre entre la cuarta y la séptima semana del embarazo, cuando los tejidos aún en desarrollo de los labios del bebé no se unen por completo. Se puede abrir una hendidura a un lado de labio, en ambos lados y ocasionalmente en medio. En los casos más severos, la abertura de labios se puede extender hasta la nariz. Algunos bebés con labio leporino también tienen hendiduras en sus paladares, pero un labio leporino puede presentarse sin este defecto adicional.
La cirugía es la mejor opción para cerrar el labio leporino. Se suele hacer cuando todavía son muy pequeños, entre las 6 semanas y los 9 meses de edad. Después de la cirugía, es posible que el niño necesite someterse a otra operación en el futuro, sobre todo si la deformación tiene un gran efecto sobre la zona de la nariz.
En el caso del paladar hendido, también se opera, en general, durante el primer año de vida del pequeño. Además, en algunas ocasiones se utiliza un dispositivo protésico temporal para cerrar el paladar, de modo que el bebé pueda alimentarse y crecer hasta que se pueda operar.
La mayoría de los bebés se curan sin dificultad y, según la gravedad del defecto, posteriormente se tendrá que reparar la cicatriz de la operación.
Los niños a quienes se les haya practicado la reparación del paladar hendido posiblemente necesiten una consulta con un odontólogo o un ortodontista. Los dientes posiblemente necesiten corrección a medida que salen.
¿Qué es labio leporino y cómo tratarlo?

05
Feb